tag:blogger.com,1999:blog-3431967044431111764.post2330882276423894442..comments2024-01-28T18:20:58.535+01:00Comments on dialogical creativity: El «sistema de vigencias»: clave para comprender cualquier realidad socialÁlvaro Abellán-García Barriohttp://www.blogger.com/profile/05547611870232694281noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-3431967044431111764.post-8299266185365578322020-05-21T16:51:17.585+02:002020-05-21T16:51:17.585+02:00Muchas gracias Álvaro, tus respuesta me han ayudad...Muchas gracias Álvaro, tus respuesta me han ayudado mucho y me animan a seguir investigando sobre este tema tan interesante. Leeré el libro de la estructura social.También me interesan sus reflexiones sobre 1984, que recientemente he leído.<br /><br />Muchas gracias, un saludo. Guillermonoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3431967044431111764.post-92049859111795747502020-05-21T14:11:51.128+02:002020-05-21T14:11:51.128+02:00Hola, "anónimo". Gracias por tus palabra...Hola, "anónimo". Gracias por tus palabras. Paso a responder a tus preguntas.<br /><br />Sí, las vigencias pueden cambiar (la viñeta que encabeza esta publicación refleja qué vigencias educativas había "antes" y cuáles hay "ahora"). <br /><br />¿Cómo cambian? Fundamentalmente, por el "paso de las generaciones": lo que una generación vivía de una manera, la siguiente puede querer vivirlo de otra (distinta, o tal vez incluso contraria a la generación anterior). Y, más en concreto, en cada generación hay algunas "minorías" que lideran ese cambio de vigencias, que las proponen, promueven o contagian a sus coetáneos. Y esto pueden hacerlo de forma más o menos espontánea o de forma más coordinada, como hacen los "lobbies". <br /><br />Las vigencias siempre ejercen "presión social", lo que ocurre es que muchas veces no la notamos (porque estamos tan influidos por ellas que su efecto nos parece algo natural, propio, íntimo). Ahora bien, esa presión es ambivalente: algunas veces nos coarta (cuando es contraria a nuestras pretensiones), otras nos impulsa o proyecta (cuando facilita el logro de nuestras pretensiones). Y, a veces, que nos coarte puede estar bien (por ejemplo, si nuestra pretensión es injusta o dañina para nosotros o terceras personas). En ese sentido, con frecuencia las vigencias "educan" nuestra libertad.<br /><br />El mejor libro que conozco para que sigas aprendiendo sobre las vigencias sociales es "La estructura social" de Julián Marías (disponible aquí): http://www.cervantesvirtual.com/obra/la-estructura-social-teoria-y-metodo/<br /><br />Hace poco escribí una reflexión que, por tus preguntas, tal vez te sea útil: el análisis de las vigencias sociales en 1984 (de George Orwell), que puedes descargar aquí: http://ddfv.ufv.es/handle/10641/1840<br /><br />Un saludo,<br />Álvaro.Álvaro Abellán-García Barriohttps://www.blogger.com/profile/05547611870232694281noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3431967044431111764.post-35091097345115331222020-05-21T13:26:48.819+02:002020-05-21T13:26:48.819+02:00Hola, Alvaro, muchas gracias por su publicación, e...Hola, Alvaro, muchas gracias por su publicación, es muy interesante. Tengo una pregunta, ¿una vigencia puede cambiar? y si es así, ¿Cómo lo hace?. ¿Podría darse que una vigencia coartase la libertad a modo de presión social?. Muchas gracias, un saludo<br />Anonymousnoreply@blogger.com